Difícil semana para Bombardier. Dos aviones del fabricante se han visto implicados en accidentes mortales con una diferencia de un día. Las investigaciones no han hecho nada más que comenzar y Bombardier ha emitido una nota de prensa ofreciendo sus condolencias a las familias de las víctimas del Q400 de Nepal, pero defendiendo la seguridad de su modelo.
El 10 de marzo, un avión privado Challenger 604 se estrelló en Irán. En el accidente fallecieron 11 personas (8 pasajeros y 3 tripulantes).
Un día después, el 11 de marzo, Bombardier sufría otro golpe. Esta vez con uno de sus aviones de bandera, el Dash 8 Q400, que se estrellaba en Nepal matando a 49 personas, incluyendo toda la tripulación.
Tras el último accidente, Bombardier lanzó un comunicado informando de que sus investigadores están en contacto con las autoridades para ofrecer toda la ayuda que pudieran necesitar. El fabricante afirma que el Q400 fue "diseñado para cumplir o superar todos los requisitos del certificado de aeronavegabilidad". El turbohélice entró en servicio en el año 2000 y existen unos 500 aparatos en el mundo en servicio.